Orígenes y primeros años (1978-1987)

En 1978, la Escuela Consolidada de Experimentación, formada por la fusión de las Escuelas Rurales N° 3 y 4 del Puerto de Huasco, recibió el nombre de “Japón”, gracias al Decreto N° 204 del 9 de marzo de ese año. Este cambio fue apadrinado por el Gobierno de Japón, que donó valioso equipamiento, destacándose una Banda Instrumental que marcó el inicio de una tradición cultural.

El 22 de septiembre de 1979, el establecimiento se transformó en el Liceo C-9 “Japón”, incorporando enseñanza prebásica, básica y media. En 1981, obtuvo el Decreto Cooperador de la Función del Estado (N° 5083) y celebró la graduación de su primera promoción de estudiantes de cuarto medio, consolidándose como un espacio clave para la educación en la comuna.

Expansión académica y técnica (1988-1996)

En 1988, el liceo implementó una jornada nocturna destinada a trabajadores de la comuna, permitiéndoles regularizar sus estudios. Dos años después, en 1990, introdujo la carrera de Cultivos Marinos, aprobada por la resolución exenta N° 315, marcando un hito en la diversificación de su oferta técnico-profesional.

La creación del internado mixto en 1992, con capacidad para 32 hombres y 32 mujeres, fortaleció el acceso a la educación para estudiantes de zonas rurales. En 1993, el liceo expandió sus áreas técnicas con la introducción de la carrera de Gestión Administrativa Computacional.

En 1994, bajo el Gobierno de Eduardo Frei Ruiz-Tagle, el liceo se trasladó a sus actuales instalaciones, separándose de la Escuela Mireya Zuleta. Desde entonces, el liceo atendió exclusivamente a estudiantes de enseñanza media, lo que permitió concentrar sus recursos y esfuerzos en la educación secundaria.

En 1996, se sumó al Proyecto Enlaces, capacitando a sus docentes en el uso de tecnologías digitales, marcando el inicio de su proceso de modernización.

Consolidación y modernización (1997-2007)

En 1997, el liceo implementó la Jornada Escolar Completa, aprobada por la Resolución Exenta N° 123, mejorando la calidad educativa mediante horarios extendidos.

El inicio del nuevo milenio trajo importantes cambios. En 2001, la especialidad de Cultivos Marinos se reconvirtió en Acuicultura, y se aprobaron las carreras de Electrónica y Administración. Ese mismo año, se creó la especialidad de Administración para Adultos, ampliando las oportunidades para estudiantes mayores.

En 2005, se introdujo la especialidad de Servicios de Turismo. Durante este período, el liceo también fortaleció competencias básicas en comprensión lectora para estudiantes de primero y segundo medio gracias a un PME del SACGE, que otorgó financiamiento de $4.000.000. En 2006, se inauguró una sala virtual para la especialidad de Acuicultura y se construyó un casino estudiantil con capacidad para 180 personas.

El año 2007 fue especialmente significativo:

• Se acreditó la especialidad de Acuicultura.
• Se implementaron proyectos de infraestructura, como un Laboratorio de Ciencias, un Taller Multifuncional, una CRA y un Laboratorio Húmedo.
• Se construyó un techado para la multicancha y se mejoró la red eléctrica del liceo.
• El establecimiento alcanzó el 60% de Excelencia Académica en el Sistema Nacional de Evaluación del Desempeño.

Nuevas especialidades y alianzas estratégicas (2008-2013)

En 2009, el liceo introdujo la especialidad de Electricidad, fortalecida con nueva infraestructura y equipamiento. Entre 2010 y 2012, se ejecutaron proyectos clave:

• Equipamiento técnico financiado por la Embajada de Japón y CAP Minería, con una inversión total de más de $200 millones.
• Implementación de la especialidad de Mecánica Industrial, que inició en 2012 con 39 estudiantes.

El liceo también lideró proyectos de sustentabilidad, como el Ecoriego basado en PLC y el programa Valoración de Nuestro Humedal, financiados por el Fondo de Protección Ambiental. Además, estudiantes y docentes destacaron en eventos internacionales, como la Feria Intel ISEF en Estados Unidos, ganando reconocimiento por su innovación tecnológica.

Innovación y desafíos contemporáneos (2014-2023)

En 2014, se incorporó una Dupla Psicosocial para apoyar a los estudiantes, mientras que en 2015 se implementó un Aula de Recursos para prevenir la deserción escolar. En 2016, se fortaleció el área de Convivencia Escolar y se estableció el programa PACE, facilitando el acceso a la educación superior.

En 2018, el liceo pasó a formar parte del Servicio Local de Educación Pública de Huasco (SLEPH), marcando un nuevo capítulo en su administración.

Durante la pandemia de 2020-2021, el liceo adaptó sus metodologías, implementando clases remotas y un sistema híbrido para garantizar la continuidad educativa. En 2022, se inició un proyecto de mejora de infraestructura, con una inversión de $230 millones destinada al cambio de techos y pintura exterior.

En 2023, el liceo fortaleció su relación con la comunidad empresarial a través del Consejo Asesor Empresarial Educacional (CAEE), asegurando prácticas para estudiantes con necesidades educativas especiales gracias a CMP. Además, se implementó el programa de conectividad 2030 del MINEDUC, dotando al liceo con fibra óptica.